El Gobierno de Venezuela anunció este lunes la ruptura de relaciones diplomáticas con Paraguay luego de que el presidente Santiago Peña expresara su apoyo al líder opositor Edmundo González Urrutia, lo que fue considerado por Caracas como una violación del derecho internacional y el principio de no intervención.
En un comunicado, el Ejecutivo de Nicolás Maduro informó que decidió, en ejercicio de su soberanía, retirar a su personal diplomático en Paraguay y cortar todo vínculo con Asunción. Este hecho se produce menos de dos meses después de que ambos países restablecieran relaciones en noviembre de 2023, tras la llegada de Peña al poder.
Venezuela acusó a Peña de revivir tácticas fallidas, citando como ejemplo el respaldo anterior de Paraguay al líder opositor Juan Guaidó, quien, durante su autoproclamación como presidente interino, recibió apoyo del gobierno de Mario Abdo Benítez. Venezuela calificó estos intentos de injerencia como «fracasos sin sustento político, jurídico ni social» que no hicieron más que perjudicar la democracia y la soberanía del país.
El gobierno venezolano también destacó que Paraguay estaba subordinando su política exterior a los intereses de potencias extranjeras, promoviendo agendas que atentan contra los principios democráticos y la autodeterminación de los pueblos.
Peña, por su parte, se mostró firme en su apoyo a la oposición venezolana, en especial a González Urrutia, a quien consideró «presidente electo» de Venezuela, tras una videoconferencia con él y la dirigente María Corina Machado. En su intervención, Peña hizo un llamado a la región para unirse y respaldar la voluntad popular en Venezuela, condenando lo que calificó de «regímenes autoritarios» en la región.
El Gobierno de Paraguay también reconoció a González Urrutia como legítimo presidente de Venezuela y reiteró su apoyo a la democracia en el país caribeño. A raíz de la ruptura diplomática, Asunción ordenó la salida del embajador venezolano en las próximas 48 horas y ratificó su postura de no reconocer los resultados de las elecciones presidenciales de julio de 2023, celebradas bajo el gobierno de Maduro, debido a la falta de documentación oficial confiable que respalde el proceso electoral.
El canciller paraguayo, Rubén Ramírez, afirmó que la postura de su país se basa en su compromiso con la restauración democrática en Venezuela, haciendo un llamado a una transición pacífica. Además, lamentó las violaciones a los acuerdos de Barbados de 2023 y destacó las denuncias de persecución política en Venezuela.
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