La sonda solar Parker de la NASA ha logrado un nuevo hito en la exploración espacial al convertirse en el objeto creado por el ser humano que más cerca ha estado del Sol. Este logro marca un paso significativo en la comprensión de nuestra estrella y sus complejos fenómenos.
Lanzada en agosto de 2018, la misión de la sonda Parker tiene como objetivo estudiar la atmósfera exterior del Sol, conocida como corona, y recopilar datos científicos que ayuden a predecir eventos meteorológicos espaciales que podrían impactar la Tierra. Este martes, la sonda alcanzó su mayor acercamiento, soportando temperaturas superiores a los 930 grados Celsius gracias a su avanzado escudo térmico.
La proximidad extrema al Sol impide el contacto directo con la nave durante varios días, por lo que los científicos de la misión tendrán que esperar hasta el viernes para confirmar con precisión el momento exacto del sobrevuelo. Según Arik Posner, científico del programa Parker Solar Probe, este logro representa “una misión audaz que responde preguntas fundamentales sobre nuestro universo”.
A pesar de las condiciones extremas, los instrumentos internos de la sonda se mantienen a una temperatura ambiente de 29 °C gracias a su innovador diseño. Este avance tecnológico permite que Parker continúe operando mientras se mueve a una velocidad de 690,000 kilómetros por hora, lo suficientemente rápido como para recorrer la distancia entre Washington y Tokio en menos de un minuto.
La sonda no solo está desafiando los límites de la ingeniería, sino que también está proporcionando información crucial sobre algunos de los mayores misterios del Sol. Entre ellos, cómo se origina el viento solar, por qué la corona es significativamente más caliente que la superficie solar y cómo se forman las eyecciones de masa coronal, enormes nubes de plasma expulsadas al espacio.
El éxito de la misión Parker subraya el compromiso de la NASA con la exploración científica y la innovación. Según Nick Pinkine, gerente de operaciones de la misión, la sonda está proporcionando datos de un territorio hasta ahora inexplorado.
A medida que la misión continúa, los científicos esperan que los datos recopilados por Parker ayuden a desarrollar modelos más precisos para entender el comportamiento del Sol, lo que podría tener implicaciones directas en la predicción de tormentas solares que afectan las telecomunicaciones, los sistemas eléctricos y los satélites en la Tierra.
Este histórico acercamiento marca un nuevo capítulo en la exploración del espacio y resalta la capacidad del ser humano para superar los límites y expandir el conocimiento del cosmos.