La contienda presidencial entre Kamala Harris y Donald Trump se presenta más competitiva que nunca, según una nueva encuesta. Aunque ambos candidatos tienen bases de apoyo sólidas, el respaldo hacia Harris se basa en su carisma personal, mientras que Trump es visto con mayor confianza en temas económicos.

De acuerdo con la encuesta realizada por CNN y SSRS, el 48% de los votantes potenciales apoya a Harris, mientras que el 47% favorece a Trump, destacando la falta de un claro líder en la carrera. Un 2% de los encuestados indicó que votaría por el candidato libertario Chase Oliver, mientras que un 1% apoyaría a Jill Stein del Partido Verde.

Este empate refleja un cambio respecto a encuestas anteriores, donde el respaldo hacia Harris era menos sólido y más basado en el rechazo a Trump. Ahora, el 60% de quienes apoyan a Harris lo hacen más por ella que por oposición a su contrincante, mientras que el 72% de los seguidores de Trump indican que su apoyo es un voto directo hacia él.

Un segmento crucial en esta elección es el de los votantes independientes. Harris mantiene una ligera ventaja entre estos votantes, con un 45% frente al 41% de Trump. Sin embargo, se observa una clara división de género dentro de este grupo: el 51% de las mujeres independientes apoya a Harris, mientras que el 47% de los hombres independientes respalda a Trump.

Harris cuenta con una fuerte ventaja entre votantes menores de 30 años, con un 55% frente al 38% de Trump. Asimismo, lidera entre los votantes afroamericanos (79% Harris, 16% Trump) y latinos (59% Harris, 40% Trump). En contraste, Trump cuenta con un sólido respaldo entre los hombres blancos, con un 58% frente al 35% de Harris.

La economía sigue siendo el tema prioritario para los votantes. Un 41% de los encuestados considera que este es el factor más importante al elegir un presidente. Entre quienes priorizan la economía, Trump tiene ventaja, con un 50% de confianza frente al 39% de Harris. A su vez, el manejo de la inmigración y la política exterior también favorecen a Trump.

Por otro lado, Harris tiene el respaldo mayoritario en temas como el aborto (52% frente a 31% de Trump), la unificación del país y la protección de la democracia. Estos factores han ganado peso entre los votantes que valoran la empatía y el liderazgo.

La encuesta también revela una creciente preocupación por el impacto del clima político en la violencia. Un 72% de los votantes considera que la violencia política es un problema grave en Estados Unidos, y el 57% teme que la situación empeore si Trump gana. En comparación, el 42% cree que el problema podría agravarse si Harris es elegida presidenta.

Con una carrera tan reñida, los votantes aún están definiendo sus preferencias finales. Aunque la economía parece ser el tema decisivo para muchos, Harris ha logrado consolidar su imagen como una líder empática, mientras que Trump sigue siendo percibido como el candidato más capacitado en términos económicos. Sin un claro ganador a la vista, esta elección promete ser una de las más disputadas en la historia reciente.

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