A la edad de 77 años, falleció en la madrugada de este sábado, José Alberto Himely Torriente, fundador del emblemático grupo Moncada. Su deceso dejo una profunda huella en la cultura musical de la isla, pues fue un referente tanto en el ámbito artístico como en el social y político del país.

Himely, Licenciado en Economía, fue un pilar fundamental del grupo Moncada, creado en 1972 por un grupo de jóvenes con una gran pasión por la música cubana. A lo largo de su carrera, desempeñó el rol de percusionista, aportando con su talento a una de las formaciones musicales más significativas de Cuba. Moncada, que marcó una época en la música de la Revolución Cubana, logró trascender por sus composiciones y su capacidad para fusionar la música tradicional cubana con sonidos contemporáneos.

A lo largo de su vida, Himely se destacó no solo por su dedicación al arte, sino también por su compromiso con la política y la sociedad cubanas. Militante del Partido Comunista de Cuba desde muy joven, se convirtió en un activista esencial dentro de la organización entre los músicos, siendo un ejemplo de lealtad, trabajo y servicio a su país. Su postura de cubano comprometido y su visión del mundo artístico le ganaron el cariño y respeto de colegas y seguidores.

Con una vida llena de esfuerzos para contribuir al desarrollo cultural de la isla, Himely también se involucró en los procesos sociales, participando activamente en la vida política de su comunidad. Fue, además, un hombre cercano a la gente, un amigo fiel que siempre estuvo dispuesto a compartir su alegría, generosidad y amor por la música con quienes lo rodeaban.

A pesar de haber estado alejado de los escenarios de manera activa en los últimos tiempos, Himely continuaba siendo un referente entre sus compañeros músicos. Los ecos de sus tambores siguen resonando en Cuba, legado que queda plasmado en las innumerables producciones y presentaciones del grupo Moncada, cuyas canciones continúan siendo un referente de la identidad cultural cubana.

El grupo Moncada, fundado bajo el liderazgo de Himely, fue una de las agrupaciones musicales que mejor representó la juventud cubana en los años de la Revolución, y su música sigue siendo parte del alma de la nación.

Por decisión de la familia, su cadáver será cremado en un acto privado. Desde el Ministerio de Cultura y el Instituto Cubano del Música se extiende un mensaje de condolencias a sus familiares, amigos y a todos aquellos que, de una u otra manera, fueron tocados por su música y su legado. La isla pierde a un hombre que dedicó su vida a hacer de la música un instrumento para construir y transmitir los valores de la cultura cubana.

José Alberto Himely Torriente deja un vacío irreparable, pero su espíritu y su música seguirán siendo una fuente de inspiración para las generaciones futuras.

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