Una mujer de 26 años, Yaquelin Domínguez-Nieves, enfrenta entre cinco años y cadena perpetua en una prisión federal después de declararse culpable de participar en una operación de contrabando de personas que terminó con la trágica muerte de más de una docena de migrantes cubanos en 2022, según información de una televisora local de Florida.

Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, Domínguez-Nieves, residente de Sebring, Florida, aceptó su culpabilidad en un tribunal federal de Miami, acusada de conspirar para contrabandear extranjeros hacia el país. Los fiscales detallaron que cobró $11,500 a familiares de los migrantes en el sur de Florida y transfirió los fondos a un cómplice en Cuba.

El 16 de noviembre de 2022, ese cómplice embarcó a 18 personas en un frágil bote de pesca, sin chalecos salvavidas y con un capitán sin experiencia. Trágicamente, la embarcación se hundió a 30 millas de su travesía, resultando en la muerte de 16 migrantes, incluidos varios niños pequeños, adolescentes y dos jóvenes de 16 años. Solo dos personas sobrevivieron al desastre.

Los cuerpos de cuatro víctimas fueron recuperados, y las autoridades confirmaron que la causa de muerte fue ahogamiento.

Domínguez-Nieves será sentenciada el 11 de abril en Miami. La noticia resalta los riesgos mortales de las peligrosas travesías que los migrantes enfrentan en busca de un futuro mejor y el alto costo de las operaciones ilegales de contrabando humano.

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