Cubano-españoles se mantienen sin derecho a ESTA si visitaron Cuba después de 2021
Redacción de CubitaNOW ~ viernes 12 de diciembre de 2025
Cubanos con ciudadanía española continúan enfrentando importantes limitaciones para acogerse al programa ESTA si han viajado a Cuba después de 2021. Aunque España forma parte del grupo de países cuyos ciudadanos pueden entrar a Estados Unidos sin necesidad de una visa tradicional, esta ventaja no se aplica plenamente a quienes poseen doble nacionalidad cubano-española.
La razón principal es la designación de Cuba como Estado patrocinador del terrorismo, una categoría que Washington mantiene y que ha generado restricciones adicionales en materia migratoria.
Desde 2025, con el endurecimiento de las disposiciones bajo la Ley de Seguridad Nacional, Estados Unidos reforzó los controles sobre cualquier viajero que haya estado en países incluidos en esa lista.
En el caso de los cubanos-españoles, la presencia en la Isla después de 2021 —aunque haya sido por turismo, visitas familiares o asuntos personales— activa automáticamente la descalificación del ESTA. Esto ocurre porque el sistema electrónico cruza información con bases de datos migratorias internacionales, lo que permite verificar entradas y salidas de cada viajero sin depender únicamente de lo que declare en el formulario.
Esta realidad implica que miles de cubanos con pasaporte español deben recurrir obligatoriamente a la visa B1/B2 para viajar a Estados Unidos, un proceso mucho más complejo. A diferencia del ESTA, que se tramita en línea y se obtiene en cuestión de minutos, la visa consular exige entrevistas presenciales, pago de tarifas más elevadas y largos tiempos de espera para conseguir una cita, especialmente en consulados donde la demanda es alta. Además, las tasas de rechazo para solicitantes cubanos o descendientes de cubanos suelen oscilar entre el 30% y el 40%, lo que añade incertidumbre y estrés al proceso.
La doble nacionalidad tampoco ofrece ninguna excepción o ventaja. Aunque el solicitante presente un pasaporte español válido, el sistema estadounidense revisa detalladamente sus movimientos previos y, si detecta una visita reciente a Cuba, se aplicará la exclusión sin importar la nacionalidad utilizada al viajar. Esto ha generado frustración entre muchos cubanos-españoles que confiaban en poder beneficiarse del programa sin restricciones.
Para quienes necesitan viajar a Estados Unidos por razones familiares, laborales o de tránsito, la situación supone un obstáculo significativo. Muchos se enteran de la descalificación solo después de presentar la solicitud del ESTA, que termina siendo automáticamente denegada. Otros han optado por evitar viajar a Cuba para no comprometer su elegibilidad futura, especialmente quienes mantienen vínculos laborales o familiares en Estados Unidos.
La normativa actual mantiene un cerco estricto para cualquier persona vinculada a Cuba, incluso cuando posee la ciudadanía de un país incluido en el programa de exención de visas. Hasta que Estados Unidos no modifique la designación de Cuba o revise estas disposiciones, los cubanos-españoles seguirán obligados a tramitar una visa convencional para ingresar al territorio estadounidense.
Estados Unidos se prepara para introducir uno de los cambios más estrictos en el Programa de Exención de Visado (ESTA) desde su creación. La administración de Donald Trump evalúa incorporar la obligatoriedad de entregar el historial de redes sociales correspondiente a los últimos cinco años, requisito que deberán cumplir ciudadanos de los 42 países actualmente integrados en este mecanismo de viaje.
La propuesta, revelada mediante un aviso de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), aún se encuentra en fase de consulta, pero marca un giro importante en la manera en que se procesan y analizan las solicitudes de autorización para ingresar a territorio estadounidense por hasta 90 días sin necesidad de visa formal.
Según el borrador de la nueva política, los solicitantes deberán incluir los nombres de usuario y plataformas donde han tenido actividad reciente, lo que permitirá a las autoridades verificar comportamientos, conexiones y publicaciones que puedan considerarse riesgosas desde el punto de vista de la seguridad.
Esta ampliación del control se enmarca en una estrategia más amplia del gobierno para reforzar los filtros frente a amenazas globales y evitar la entrada de potenciales actores vinculados a extremismo o actividades ilícitas.
Para los cubano-españoles, que ya suman cientos, se ratifica que siguen sin poder acceder al programa ESTA si viajaron a Cuba después de 2021. Aunque España forma parte de los países elegibles, la normativa estadounidense los excluye debido a la designación de Cuba como Estado patrocinador del terrorismo.
Esta regla, reforzada desde 2025, afecta incluso a quienes estuvieron en la Isla por motivos familiares o turísticos. Al detectarse un ingreso reciente a Cuba, el solicitante queda obligado a tramitar una visa B1/B2 en el consulado, un proceso más lento, costoso y con altas tasas de denegación. La doble nacionalidad no brinda excepciones, ya que los registros migratorios se verifican de forma cruzada.
En general, el escrutinio digital no será el único cambio previsto. CBP también analiza solicitar información adicional, como correos electrónicos y números telefónicos utilizados en el último lustro, así como datos personales sobre los familiares directos del solicitante. A esto se suma la intención de recopilar biometría avanzada, incluyendo huellas, ADN y escaneo del iris, con el objetivo de robustecer el proceso de verificación de identidad.
La eventual implementación coincidiría con la orden ejecutiva firmada por Trump en enero de 2025, orientada a fortalecer los controles fronterizos y actualizar protocolos de seguridad. También se estudia migrar el sistema ESTA hacia una aplicación móvil oficial, lo que implicaría el cierre progresivo del actual sitio web.
Este endurecimiento ocurre en un contexto de mayor vigilancia global. Washington mantiene un veto migratorio que impacta a más de 30 naciones, entre ellas Afganistán, Irán, Somalia y Haití, por considerar que no garantizan información confiable sobre sus ciudadanos.
Fuente: Periódico Cubano