Dos ladrones irrumpieron en una vivienda en construcción en el Reparto Juanelo, municipio capitalino de San Miguel del Padrón, mientras una persona dormía en el lugar. Según las víctimas, que no residen en la capital, los ladrones forzaron una puerta de hierro utilizando una pata de cabra y una vez dentro, se llevaron un televisor, herramientas y materiales de construcción, según reporta La Tijera que también compartió el video de seguridad.

Los propietarios de la vivienda han pedido ayuda a la comunidad para identificar a los responsables del robo, poniendo a disposición de las personas el número 53595359. 

El aumento de los hechos delictivos, un problema que ha sido reconocido por el gobierno cubano, es una evidencia de la agudización de la crisis económica. Recientemente una internauta solicitó ayuda para identificar a un ladrón que, aprovechando una bronca callejera en La Habana, robó un móvil en una vivienda mientras una cámara de seguridad captaba el acto.

Tania Vargas, la denunciante, compartió su indignación en el grupo de Facebook “Confituras en La Habana” y pidió la colaboración de los usuarios para identificar al ladrón.

En diciembre, un cubano protagonizó un aparatoso robo con fuerza en una tienda del hotel El Louvre, en pleno centro de la ciudad de Matanzas. El sujeto, identificado como José Rafael Rodríguez Durán, fue arrestado y las prendas de ropa sustraídas fueron recuperadas, según dio a conocer en Facebook la fuente oficialista "Con todos la Victoria".

Ante la escalada delictiva, muchas familias y negocios han optado por instalar cámaras de seguridad para prevenir o documentar los robos. Además, los ciudadanos recurren a las redes sociales para compartir videos y pedir colaboración en la identificación de los delincuentes. El gobierno ha reconocido el incremento de los hechos delictivos, pero las acciones para reforzar la seguridad han sido insuficientes. La población critica la ineficacia policial y la falta de recursos para enfrentar la delincuencia, mientras que las penas para los ladrones suelen ser bajas o nulas; la delincuencia pulula mientras sobre los presos políticos soportan condenas inauditas por exigir sus derechos.

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