Vuelo de SAS a Miami retorna a Copenhague por turbulencias severas en Groenlandia
Redacción de CubitaNOW ~ viernes 15 de noviembre de 2024
Un vuelo de Scandinavian Airlines (SAS) con destino a Miami tuvo que regresar a Copenhague tras enfrentar fuertes turbulencias mientras sobrevolaba Groenlandia. La aeronave, que partió de Estocolmo con 254 pasajeros, encontró condiciones climáticas adversas en una región conocida por sus bruscos cambios atmosféricos. Al encontrarse a pocas horas de llegar a Estados Unidos, los pilotos decidieron dar marcha atrás y retornar a Dinamarca para realizar inspecciones técnicas y priorizar la seguridad de todos a bordo.
La turbulencia ocurrió en la mitad del vuelo, cuyo trayecto estaba previsto durar alrededor de nueve horas. Un portavoz de SAS explicó que el fenómeno se presentó al cruzar el espacio aéreo de Groenlandia, donde los fuertes vientos y variaciones de temperatura suelen generar turbulencias severas. Ante la intensidad del movimiento, los pilotos optaron por volver a la base principal de SAS en Copenhague para una revisión técnica exhaustiva.
Aunque los detalles sobre posibles heridos no fueron confirmados, imágenes difundidas en redes sociales por algunos pasajeros mostraron escenas de desorden en la cabina, con objetos y alimentos esparcidos en los pasillos. En dichas imágenes, los pasajeros pueden verse sujetándose firmemente a sus asientos en medio del vaivén. Un portavoz de SAS indicó que no hubo lesiones graves, pero el regreso era la decisión más segura dadas las circunstancias.
La elección de Copenhague sobre Miami para el aterrizaje también respondió a razones logísticas: el aeropuerto de Miami carecía del equipo técnico necesario para inspeccionar completamente el avión tras un episodio de este tipo. Según SAS, realizar el aterrizaje en su base permitía que el personal y el equipo especializado llevaran a cabo una evaluación profunda antes de autorizar el regreso del avión a operaciones futuras.
Estas inspecciones requieren equipos avanzados y técnicos especializados, los cuales están disponibles en la base de SAS en Copenhague, garantizando que cualquier posible desperfecto sea identificado y corregido antes del próximo vuelo.