Una usuaria cubana en TikTok, identificada como Jessica Hernández (@jessicahernande576), desató una ola de comentarios y reacciones al publicar un video que muestra las condiciones de uno de los baños del Aeropuerto Internacional "José Martí", en La Habana.

En el video, además de registrar imágenes del lugar, la joven critica el trato recibido por parte del personal: “Ni hablar de la mala educación de la señorita que te atiende al entrar”, comentó con evidente molestia.

En las imágenes se observan restos de cabello en el piso, manchas visibles en los lavamanos, humedad en las paredes y un ambiente general de descuido. Aunque el estado no llega a ser catastrófico, sí refleja una falta de limpieza y mantenimiento que llama la atención por tratarse del principal aeropuerto del país.

El video no solo se enfocó en el entorno físico, sino también en la actitud del personal, algo que ha sido un punto constante de crítica en redes sociales. La publicación se volvió viral rápidamente y reabrió el debate sobre la calidad de los servicios públicos en Cuba, en especial aquellos destinados a los viajeros internacionales.

Usuarios de redes sociales compartieron sus propias experiencias, algunas incluso más negativas. “Por lo menos no entraste cuando había orina en el suelo”, escribió un usuario. Otro añadió con tono sarcástico: “Da gracias que te dejaron grabar y que no esperaron a vigilar todo lo que hacías en el baño”.

Algunas respuestas minimizaron el problema o buscaron justificarlo: “Está más bonito que el de Miami”, opinó una mujer en tono comparativo. Sin embargo, la mayoría coincidió en que hay mucho por mejorar, no solo en términos de limpieza, sino también en la atención al cliente y la presentación general del aeropuerto.

Jessica respondió a varios de los comentarios y dejó claro que no es la primera vez que enfrenta esta situación. “Seguimos en las mismas”, sugiriendo que la falta de mejoras es un problema prolongado y sistemático.

Más allá del caso puntual del baño, el tema pone en evidencia deficiencias estructurales en los servicios del Aeropuerto "José Martí", como la desorganización, la escasez de recursos en los controles de seguridad y la falta de atención al detalle. Para muchos cubanos y visitantes, este tipo de situaciones empañan la experiencia de viaje y dan una imagen poco favorable del país a quienes llegan del extranjero.

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