Vivir en el edificio ubicado en el 1353 de la Calzada de 10 de Octubre en La Habana, es un reto cada día, así lo describen las familias que permanecen allí aunque el inmueble está catalogado como inhabitable.

Un extenso reportaje de CubaNet, pone sobre el tapete las penurias de quienes residen en el edificio construido en en 1903.

Actualmente, allí continúan un total de 13 familias, núcleos “compuestos por 13 hombres, 14 mujeres, seis menores de edad de entre tres meses y 11 años, y tres ancianos”. Los 36 habitantes del edificio distan de ser personas sanas “cinco presentan afecciones crónicas de salud: dos enfermos de VIH-SIDA, un epiléptico, un diabético y un esquizofrénico-paranoico”, describe CubaNet donde relatan todas las acciones infructuosas que esas personas han realizado para al menos conseguir espacio en albergues.

 “Dormimos con un ojo abierto y otro cerrado. Si el gobierno no nos ayuda, somos conscientes de que un día el edificio nos va a enterrar”, lamenta un entrevistado.

Pues a parte, de las filtraciones y la inexistencia de sanitarios “en varios puntos de las habitaciones y pasillos el piso se hunde incluso con las pisadas de los niños”.

A inicios de los dos mil, una parte de las personas que allí vivían fueron trasladadas a albergues. Incluso uno de los vecinos del lugar dice el gobierno municipal de Diez de Octubre se habría comprometido a progresivamente terminar de reubicar el resto de los núcleos en nuevos sitios transitorios. Sin embargo, como constató ese medio “15 años después sólo unas pocas personas han logrado abandonar el edificio, la mayoría acogidas por familiares”.

Mientras el gobierno se desatiende por la suerte de esas personas “la posibilidad de terminar aplastados bajo toneladas de escombros”, es la realidad del día a día de quienes habitan el inmueble.

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