Pinar del Río se prepara para una temporada crítica: prevén hasta 112 incendios forestales en 2026
Redacción de CubitaNOW ~ viernes 26 de diciembre de 2025
Las perspectivas para la próxima temporada de incendios forestales en Pinar del Río son preocupantes. A pocas semanas del período considerado de mayor peligro —entre enero y mayo—, especialistas calculan que en 2026 podrían registrarse entre 85 y 112 siniestros en la provincia, con daños potenciales de hasta 4.000 hectáreas.
La alerta se sustenta en una combinación de factores: alta acumulación de material combustible en áreas boscosas, déficit de lluvias y deterioro de los caminos forestales, elementos que complican tanto la prevención como la respuesta operativa ante focos de fuego.
Según declaró a Granma Rubén Guerra Corrales, jefe de Gestión y Manejo del Fuego del Cuerpo de Guardabosques (CGB), Pinar del Río —considerada la segunda provincia más reforestada del país— cerró 2025 con alrededor de un centenar de incendios. De ese total, 13 fueron clasificados como grandes o muy grandes y concentraron casi el 80% de las más de 9.000 hectáreas afectadas durante el año.
Las autoridades insisten en que el origen de la mayoría de los incendios es humano, asociado a negligencias e indisciplinas. Ante ese panorama, el CGB ha reforzado la coordinación con entidades del sistema de la Agricultura y otros organismos con presencia o influencia en zonas boscosas, con el objetivo de disminuir prácticas de riesgo.
En paralelo, se desarrollan acciones educativas en comunidades y centros escolares, además de campañas en medios de comunicación, enfocadas en promover una mayor conciencia ambiental. Guerra Corrales subrayó que donde existe una cultura de protección del entorno, el número de incendios tiende a ser menor. Como ejemplo, citó el municipio de Viñales, de marcada geografía montañosa, donde —según el reporte— solo se registró un incendio en todo 2025.
El contraste lo marcan territorios como San Juan y Martínez, Mantua y Minas de Matahambre, que acumulan reportes reiterados en los últimos años.
Pese a las dificultades, la provincia cuenta con herramientas de vigilancia: un sistema para detectar focos de calor mediante satélites y una red de torres de observación en la serranía. No obstante, las autoridades recalcan que la prevención real depende, en buena medida, del involucramiento ciudadano, especialmente de las comunidades ubicadas cerca de las áreas forestales.