La periodista cubana Natasha Vázquez cuestionó el método de venta de entradas en el Teatro Nacional para el concierto del cantautor Pablo Milanés.

Vázquez, residente en Rusia, recordó los tiempos en los que trabajó en el equipo del artista y calificó de "abominable" que lo hayan puesto en esta disyuntiva y "lo estén haciendo pasar por este mal rato, cuando tal vez sea una de sus últimas oportunidades de cantar en Cuba".

"Lo que han hecho con él, y con su público, es imperdonable", dijo.

"En el tiempo que trabajé con Pablo recuerdo que un momento de particular estrés era siempre el de repartir las entradas para los conciertos. El artista recibe una cantidad y el resto las distribuyen los organizadores. Y siempre para él se han quedado cortas, por muy grande que sea el teatro. Pero esta vez sospecho que son otros los motivos para la indignante situación que se ha dado, y que tienen más que ver con los miedos de algunos que con la admiración de otros", comentó.

"Ahora muchos piden que cancele el concierto, o que lo haga en un lugar público, esto último algo que no depende de su voluntad únicamente. Pablo debe estar ahora mismo debatiéndose para decidir qué hacer y estoy segura de que tomará la decisión correcta, que será la que le dicte su conciencia. Cualquiera que sea no gustará a todos y siempre habrá quien lo critique, a uno y otro lado, eso no es nada nuevo para él. Pero sí lo es que ahora tiene casi 80 años y un estado de salud delicado por lo que es doblemente abominable", agregó.

Luego de la polémica por la venta de entradas a "organismos" estatales, decenas de cubanos piden al cantautor Pablo Milanés que realice su concierto en La Habana en un espacio al aire libre.

"Muchas veces nos dijiste, que antes de hacerlo, había que pensarlo muy bien. Por el pueblo que te escucha, te respeta y te ama, me uno a la voz de muchos en su pedido: cancela tu concierto, hazlo al aire libre, sitiaremos por ti cualquier plaza. La libertad, al igual que la música, y que tú, no tienen dueños", escribió el activista Manuel de la Cruz en sus redes sociales.

"Lo que le están haciendo a Pablo es miserable", comentó por su parte el científico cubano Amílkar Pérez Riverol.

"Pablo tiene 79 años. Hace solo unos meses perdió a Suylén, una de sus hijas. Cada año —por su público, económicamente no lo necesita— regresa a Cuba. Su público es ese que madrugó para poder verlo. No una manada autómata que no irá a un concierto sino a una misión. Pablo es —más que el artista— uno de los cubanos más queridos y respetados hoy", dijo.

"Los niveles de vileza a los que están llegando las autoridades en Cuba con cosas y gente tan sagrada son sencillamente asquerosos", denunció.

Pablo Milanés tiene previsto un concierto en La Habana el próximo martes 21 de junio. El pasado miércoles cientos de cubanos hicieron filas desde la madrugada para comprar los boletos pero la dirección del teatro informó que la mayoría habían sido destinadas a organismos estatales.

Hasta el momento ni Pablo, ni nadie de su equipo se ha pronunciado sobre lo sucedido.

Recomendado para ti