La desaparición de la RCA Víctor en la calle Neptuno representa otro golpe a la rica historia arquitectónica y cultural de La Habana. Fundada en enero de 1929, la RCA Víctor fue una pieza clave en la evolución de la radio, no solo en Cuba sino a nivel mundial. La tienda, que abrió sus puertas el 21 de abril de 1930, era conocida por ofrecer televisores, radios, tocadiscos y vitrolas, y se convirtió en un hito de la tecnología y la cultura en la capital cubana.

La RCA Víctor fue parte integral del auge de la radio en Cuba, que comenzó en la década de 1920. En 1922, la emisora PWX, propiedad de la Cuban Telephone Company, realizó la primera transmisión radial en Cuba. La radio rápidamente se convirtió en un medio de comunicación masivo, con estaciones como CMQ y RHC Cadena Azul, que desempeñaron un papel crucial en la vida cotidiana de los cubanos. La popularidad de la radio creció exponencialmente, y para la década de 1940, Cuba era uno de los países con mayor número de estaciones radiales per cápita en el mundo.

El deterioro y eventual demolición de la RCA Víctor refleja un patrón más amplio de abandono y destrucción del patrimonio cultural de La Habana. Edificios emblemáticos como el cine teatro Pairet, la sala polivalente "Kid Chocolate", el Teatro Musical y el hospital "Pedro Borrás" han corrido la misma suerte. La falta de acción por parte del gobierno cubano para preservar estos lugares históricos ha llevado a la pérdida de importantes vestigios del pasado.

La Habana, una ciudad que una vez fue símbolo de grandeza y modernidad, está llena de ruinas que atestiguan su antiguo esplendor. La demolición de la fachada de la RCA Víctor, que se había convertido en un basurero, es solo el ejemplo más reciente de cómo la historia de la ciudad está siendo borrada, dejando un vacío en la memoria colectiva de sus habitantes.

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