Según el informe de las Perspectivas de la Población Mundial 2024 de la ONU, Cuba enfrenta un alarmante decrecimiento poblacional que proyecta menos de seis millones de habitantes para el año 2100. Estas proyecciones reflejan una profunda crisis demográfica y socioeconómica en la isla.

El análisis de la ONU resalta que los nacimientos en Cuba disminuirán drásticamente, con una media proyectada de menos de 40,000 nacimientos anuales, comparado con el pico de más de 260,000 entre 1960 y 1970. En contraste, se estima que casi 2,5 millones de cubanos serán mayores de 60 años para finales del siglo, con una esperanza de vida de más de 85 años. La tasa de mortalidad alcanzaría 17 por cada 1,000 habitantes, resultando en aproximadamente 95,000 muertes anuales, más del doble de los nacimientos.

El estudio de la ONU también señala que la población mundial alcanzará su punto máximo antes de lo previsto en informes anteriores, estimándose en poco menos de 10.300 millones de personas en 2084. Sin embargo, las perspectivas para Cuba son particularmente sombrías, agravadas por un reciente estudio demográfico independiente.

El economista y demógrafo cubano Juan Carlos Albizu-Campos reveló datos aún más desalentadores: la población actual de Cuba se sitúa en 8,62 millones, habiendo disminuido un 18% entre 2022 y 2023. Este drástico descenso se atribuye principalmente al éxodo masivo desde 2021, impulsado por motivos económicos y políticos. La falta de estadísticas oficiales confiables, exacerbada por el retraso del censo poblacional de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) hasta 2025, subraya la necesidad de estudios independientes como el de Albizu-Campos para obtener una visión precisa y sin sesgos.

Albizu-Campos criticó las cifras oficiales de la ONEI, que reportaban 11,11 millones de habitantes en 2021, estimando en su lugar una población de 10,48 millones para esa fecha, basándose en los padrones electorales. Además, el primer coronel Mario Méndez Mayedo, del Ministerio del Interior, indicó que cerca de tres millones de cubanos residen en el exterior, reflejando la magnitud de la diáspora cubana.

El artículo publicado por Albizu-Campos y Sergio Diaz-Briquets en 2023, y reproducido en DIARIO DE CUBA, advierte que la migración continuará debido al acuerdo de 1994 y las políticas migratorias estadounidenses que favorecen la reunificación familiar. No obstante, la emigración no es el único factor del declive demográfico cubano. En 2023, Cuba registró alrededor de 90,300 nacimientos, la cifra más baja en seis décadas, lo que resalta un saldo negativo en el crecimiento vegetativo con más muertes que nacimientos.

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