El cubano Jorge Alberto Graverán, desaparecido desde el pasado viernes 28 de octubre, fue hallado muerto.

“Mi papá fue secuestrado. Apareció amarrado de manos y pies cabeza tapada y envenenado. Ya hay detenido, pero aún las autoridades no dan veredicto”, aseguró al medio independiente CiberCuba el hijo de la víctima.

El hombre, de 51 años, salió en su motorina alrededor de las 9 y 30 de la noche y no regresó. Residía en el barrio Zamora, perteneciente al municipio capitalino de Marianao.

"Descansa en paz mi amor.Siempre te amare con todas las fuerzas de mi corazon.Este es el dolor mas fuerte que he sentido en mi vida", escribió en Facebook su esposa, Mileydis Núñez.

La mujer aseguró también al citado medio lo ocurrido y dijo que el caso se encontraba bajo investigación.

Reportes en redes sociales indicaban que la moto en la que salió Graverán de su casa la había tomado empeñada.

La pasada semana su hermano Ovidio ofreció una recompensa de 5000 dólares por información que ayudara a dar con el paradero del hombre.

"Te juro que no voy a parar hasta encontrarte. Siento un dolor tan inmenso que solo quien lo vive es quien lo sabe", comentó su esposa en ese momento.

Los reportes de desaparecidos en Cuba son cada vez mayores. Los familiares a veces denuncian los casos durante meses y en muchas ocasiones cuestionan la lentitud con la que actúan las autoridades.

Uno de los casos más mediáticos ha sido el de la joven Yaniset Rojas Pérez, de Cienfuegos, que desapareció desde el 18 de marzo tras salir de su trabajo.

Desde entonces no se sabe nada de ella. Su madre publica habitualmente desgarradores mensajes en sus redes sociales en medio de la desesperación.

"Desaparecida sí, ausente no, ilusionada como toda madre que le duele para regalarle un poquito a una persona que le hace mucha falta, un día lo sabrán. Me convertiré en acusadora, las hormigas irán al basurero, los culpables pagarán, yo no la voy a dejar de buscar, es mi hija, es mi dolor, no es el dolor de ellos", comentó recientemente.

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