La joven actriz cubana Niurka Caballero Colina llegó recientemente a Estados Unidos después de una larga travesía que comenzó por Nicaragua y que duró más de dos semanas.

A través de su canal de YouTube, la artista explicó detalles del recorrido que realizó para lograr llegar a tierra de libertad y aseguró que salió en busca de libertad.

“Cuando un ser humano se siente atrapado, sale en busca de lo más preciado que es su libertad. Salí dispuesta a enfrentarme a todo porque sabía que nada podía ser peor que vivir la vida condenada a una realidad que no era la que quería para mí”, escribió junto a las imágenes.

La joven, que asegura que el 11 de julio de 2021 participó en las protestas antigubernamentales que acontecieron en varias ciudades cubanas, refirió que solo ese día se sintió libre en Cuba.

“El 11 de julio del 2021 salí a las calles pidiendo libertad y confieso que me sentí libre por primera vez. Un año después, el 11 de julio del 2022, el universo me lo concedió. El 1111 está asociado a la manifestación de los deseos. Hoy pido por todos los cubanos que aún se sienten atrapados como me sentía yo. La libertad es inherente a los seres humanos”, dijo.

“Mi vida tuvo un antes y un después del 11 de julio. Yo salí a las calles de La Habana a gritar libertad. Fue la primera y la única vez que me sentí verdaderamente libre en mi país. Esos instantes de manifestación fueron mágicos, en los que todo el mundo se sentía igual porque fue algo espontáneo. Era la primera vez que el pueblo salía a las calles sin ponerse de acuerdo”, agregó en declaraciones al medio digital Periódico Cubano.

De igual modo, denunció la represión del régimen contra el pueblo y aseguró que en Cuba el pueblo carece de derechos elementales.

“Ellos estaban tan paranoicos, pues había un despliegue militar horrible en todo el país y en la capital creo que mucho más. Vi un despliegue de carros militares que nunca había visto”, apuntó.

Después de las protestas, la joven se sintió cada vez más asfixiada en la Isla. “Vivir en Cuba ya se me había convertido en un verdadero agotamiento psicológico y físico. Y yo la verdad que no quería seguir formando parte de una realidad la cual yo no había escogido. Entonces tomé la decisión, muy difícil para mí, porque dejaba a mi familia, a mis amigos atrás y mi carrera”, dijo.

“Me sentía asfixiada. Yo salí de Cuba traumatizada por los últimos acontecimientos que me tocó vivir. Si yo me quedaba unos meses más creo que me hubiese enfermado de los nervios, porque ya yo no podía más”, agregó.

Por otro lado, agradeció a quienes la ayudaron y acompañaron durante el periplo.

“Muchas gracias a mi hermano, a mi cuñi Katy, a mis amigos incondicionales, a mi familia por el apoyo. Gracias a todos los que me dieron fuerzas cuando más la necesitaba, a mi amigo Oscar que fue mi apoyo emocional cuando sentía que me ahogaba en la triste realidad que se vive hoy en mi país”.

Por otro lado, recordó su emotiva llegada a Estados Unidos y aseguró que se sintió segura. “Cuando hice la travesía y toqué tierra americana, esa fue la emoción más grande porque me sentí libre y a salvo. Sentí que todos los problemas habían quedado atrás, como que ya yo iba a estar bien”.

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