Exrector de la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI) ejerce como profesor en Miami
Redacción de CubitaNOW ~ viernes 6 de diciembre de 2024
Filiberto López Cosío, quien fuera rector de la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI) en Cuba, ahora reside en Miami, Estados Unidos, donde ejerce como profesor de ciencias de la computación. Este cambio de escenario ha desatado críticas, especialmente por parte del influencer y activista cubano Eliecer Ávila, quien en su canal de YouTube lo señaló como un defensor de la dictadura cubana.
López Cosío, según Ávila, ha sido parte de la élite del Partido Comunista de Cuba (PCC), promoviendo políticas y discursos alineados con el régimen. A pesar de ello, hoy disfruta de las libertades y oportunidades de un país que, durante años, fue blanco de críticas por parte del gobierno cubano.
Eliecer Ávila también denunció que López Cosío mantiene vínculos con la dirigencia actual de la UCI y que ha sido invitado a participar en un evento científico en Cuba el próximo año. Esto ha generado indignación entre opositores al régimen, quienes ven en estas acciones una contradicción flagrante: individuos que desempeñaron roles clave en la defensa de la dictadura ahora se benefician del sistema que en su momento atacaron ideológicamente.
El caso de López Cosío no es aislado. Durante los últimos años, un número creciente de antiguos funcionarios y simpatizantes del régimen cubano se han asentado en Estados Unidos, alegando "temor creíble" para obtener estatus migratorio. Este fenómeno pone de manifiesto una problemática más amplia: la facilidad con la que individuos vinculados a la represión y propaganda del régimen logran establecerse en el país que alguna vez demonizaron.
Este tipo de situaciones genera descontento entre los exiliados cubanos, especialmente aquellos que sufrieron directamente la persecución política en la isla. Argumentan que permitir que figuras como López Cosío vivan y trabajen en Estados Unidos sin enfrentar consecuencias por su pasado es una afrenta a los valores de justicia y libertad que el exilio ha defendido por décadas.
La presencia de exmiembros del PCC en territorio estadounidense plantea preguntas sobre los mecanismos de inmigración y el escrutinio aplicado a estos casos. Para muchos, no se trata de negarles la oportunidad de rehacer sus vidas, sino de exigir responsabilidad por su papel en la maquinaria opresiva de la dictadura cubana.