El cubano Raibel Palacio, quien falleció tras ser reclutado por el ejército ruso para la guerra de Ucrania, fue enterrado en una fosa común.

Su esposa Melissa Flores dijo que las autoridades ignoraron las promesas de repatriación del cuerpo.

Flores dijo a The Wall Street Journal, que su esposo fue enterrado sin ninguna ceremonia y que supo de su muerte a través de otro cubano reclutado por los rusos, quien le dijo “que Raibel había recibido un disparo de un dron en la pierna y que se había desangrado mientras intentaba ponerse un torniquete”.

Este mercenario cubano le explicó que su esposo fue enterrado en “una fosa común, sin ninguna ceremonia ni bandera”.

En tanto, la madre de Palacio manifestó que le habían prometido que la contactaría desde la embajada rusa en La Habana para la repatriación del cuerpo de su hijo.

“Yo lo que quiero saber es dónde me tienen a mi hijo, dónde me lo tienen, porque me dijeron que me iban a mandar el cuerpo, que me iban a contactar con la Embajada cubana en Rusia y no vemos nada claro”, señaló la señora, no identificada en la nota

Raibel Palacio Herrera, de 21 años y padre de dos niñas pequeñas, murió en la ciudad ucraniana de Jerson el 12 de enero pasado.

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