El perfil oficialista Con Todos La Victoria informó sobre la detención de dos ciudadanos sorprendidos mientras desmontaban parte de la estructura del Parque Zoológico de Cárdenas, en la provincia de Matanzas. El incidente, que generó amplio debate en redes sociales, reavivó las críticas al estado de abandono del centro recreativo, que según numerosos internautas lleva años sin animales ni servicio al público.

De acuerdo con la publicación, los jóvenes identificados como Mauro García Torriente y Eduard Lesduan Santos Martínez fueron capturados infraganti mientras intentaban extraer bloques de una de las jaulas del recinto. El reporte señala que ambos enfrentan ahora un proceso por el presunto delito de robo con fuerza, cometido además en un espacio destinado a la recreación infantil y familiar.

Sin embargo, lo que podría haber sido solo un caso más de vandalismo ganó otra dimensión con las reacciones de los usuarios, quienes aseguran que el zoológico lleva largo tiempo en ruinas y sin animales, lo que habría facilitado que estas acciones se repitan una y otra vez sin control.

Entre los comentarios recopilados destacan las quejas de vecinos y visitantes frecuentes del área. La usuaria Madelin expresó que, aunque rechaza el robo y la delincuencia, el zoológico “es más un lugar de terror que un zoológico”, afirmando que en ese espacio “no queda ni una lagartija”. Propuso incluso demolerlo y convertirlo en un parqueo o un área para viviendas.

Por su parte, Lucía recordó que el lugar lleva años cerrado al público. Contó que intentó llevar a su nieto hace aproximadamente cuatro años, como solía hacer con sus hijos, pero tuvieron que marcharse sin ver ningún animal. “El niño se quedó con las ganas; solo pudo ver fotos antiguas”, lamentó.

Otro vecino, Elien, fue más directo en señalar responsabilidades administrativas. Aseguró que el robo de materiales en el zoológico no es nuevo y que las instalaciones han sido destruidas “columna por columna” durante meses. Añadió que, aunque el sitio ya no ofrecía servicios ni albergaba animales desde hace casi dos años, la falta de vigilancia y de control institucional favoreció la situación. “Muchas veces denunciamos el asunto, pero nunca se actuó”, comentó.

El caso expone no solo la comisión de un delito, sino también el deterioro prolongado de un centro que por décadas fue un espacio para el esparcimiento familiar en Cárdenas. La situación ha generado preocupación entre residentes, quienes ven en estos hechos la consecuencia directa del abandono estatal y la falta de mantenimiento.

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