En la ciudad de Maricá, Brasil, un accidente fatal ha teñido de luto las celebraciones navideñas. Un árbol de Navidad flotante, de 56 metros de altura, colapsó mientras era instalado en la laguna de Araçatiba, dejando como saldo un joven trabajador fallecido y dos heridos.

El hecho ocurrió el lunes 16 de diciembre, cuando una intensa tormenta con fuertes vientos y lluvias torrenciales azotó la región. La estructura, montada sobre una isla flotante, no pudo resistir las condiciones climáticas adversas y se desplomó en cuestión de segundos. Entre las víctimas se encuentra Vinícius dos Santos Abreu, de 21 años, quien perdió la vida en el incidente.

Las autoridades locales informaron que Defensa Civil había emitido una alerta previa sobre las malas condiciones meteorológicas, pero los trabajadores no lograron evacuar a tiempo. Algunos testigos relataron escenas de desesperación, con empleados lanzándose al agua para escapar del colapso de la gigantesca estructura metálica.

Dos de los operarios sobrevivientes fueron trasladados al Hospital Municipal Ernesto Che Guevara, donde recibieron atención médica. Ambos se encuentran fuera de peligro, aunque uno permaneció bajo observación debido a lesiones leves. Sin embargo, el joven Vinícius dos Santos Abreu no sobrevivió y fue declarado sin vida en el Hospital Conde Modesto Leal.

En respuesta a la tragedia, el alcalde de Maricá, Fabiano Horta, decretó dos días de luto oficial y canceló las festividades navideñas en el municipio. “Como señal de respeto hacia las víctimas, no encenderemos las luces navideñas este año”, expresó el alcalde en un comunicado.

El incidente ha generado conmoción en la comunidad y una investigación policial está en marcha para determinar posibles responsabilidades en la instalación del árbol. Mientras tanto, la ciudad de Maricá enfrenta un momento de duelo, marcado por la pérdida de una vida en un evento que debía simbolizar unión y esperanza.

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