Varios cubanos lamentaron ante la prensa oficialista la escasez de aceite comestible, particularmente en las provincias orientales del archipiélago, luego de que la empresa refinadora de Santiago de Cuba presentara afectaciones técnicas por una avería durante dos meses y medio.

Un reporte del medio Tele Turquino, recogió algunas opiniones. “Ni hablar de la situación del aceite, está golpeando a todo el mundo. Uno respira un poquito cuando llega a la bodega, pero de ahí para allá no tenemos dónde comprarlo”, dijo una entrevistada.

“No sé en las tiendas en MLC (Moneda Libremente Convertible). Cuando uno no tiene MLC, por supuesto, no tengo dónde buscarlo”, agregó. El material reconoce que la escasez ha aumentado la oferta en el mercado negro a precios exorbitantes.

“Hay que estarlo comprando por fuera, con los precios… Hasta ahora, una sola vez lo he pagado y fue a 500 pesos cubanos”, dijo otro entrevistado. En 2021, el gobierno cubano fijó el salario mínimo del país en 2100 pesos por lo que el precio del aceite representaría casi una cuarta parte del sueldo mensual. “No sabes dónde lo vas a comprar porque todo es caro”, dijo otra.

La refinadora actualmente, después de solucionar la avería en una de las áreas de producción, reajusta su línea de envases de un litro de aceite, con un plan de más de 800 toneladas, según comentó un directivo al referido medio.

“Nos dimos a la tarea de priorizar el aceite para la canasta básica y el consumo social de las provincias orientales, que es uno de los objetivos fundamentales de nuestra empresa, además de surtir en el formato que trabajamos a todas las provincias de la región y del resto del país”, dijo otro directivo.

La entidad extendió la jornada a 12 horas de trabajo para incrementar los niveles productivos. La prensa oficialista destacó que la refinadora, que garantiza el aceite a granel para la canasta normada de los territorios en el oriente de la isla, recuperó momentáneamente sus niveles productivos.

La rotura presentada en una centrífuga había impedido la entrega de aceite envasado en pomos de un litro de capacidad, bolsas flexibles de medio litro y porrones de cinco litros.

Reportes anteriores ilustraban la compleja situación para adquirir el demandado comestible. En febrero, los cubanos denunciaban que el aceite no aparecía ni siquiera en las tiendas que lo comercializaban en MLC, comúnmente más abastecidas con unos garrafones de 20 litros.

“Nadie tiene y para colmo por la bodega en febrero no toca, y en CUP por la libreta está perdido, hay que estar el día entero en la calle para enterarte en dónde sacan”, describía un usuario en declaraciones a medios independientes. “La gente está como loca con el tema del aceite. Familias completas sin aceite para cocinar. Ni los revendedores tienen”, añadía.

En noviembre pasado, el gobierno anunció la distribución gratuita de aceite a la población gracias a una donación de parte de Rusia consistente en tres millones de dólares a través del Programa Mundial de Alimentos (PMA), para la compra de más de 600 toneladas de aceite de girasol. Las autoridades cubanas prometían que en junio de 2021 habría aceite en todas las tiendas del país, gracias a la recuperación de la línea de producción de un litro en la fábrica de Santiago de Cuba.

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