Al menos 19 personas continúan detenidas en centros penitenciarios de Cuba, esperando el proceso de instrucción penal, tras participar en las protestas populares de marzo en diversas áreas de la isla.

Según denunció el Centro de Derechos Humanos de Cuba a Radio Martí, entre los arrestados se encuentran siete residentes de Santiago de Cuba, seis jóvenes del poblado de San Andrés en Holguín, uno en Cacocum (también en Holguín), otro en Bayamo (Granma), y uno más en Sancti Spíritus.

Además, permanecen detenidas bajo investigación dos personas en Matanzas y una en Cienfuegos, esta última incomunicada, por participar en las manifestaciones contra los apagones, la falta de alimentos y medicinas, y el alto costo de la vida.

La líder opositora Martha Beatriz Roque, coordinadora del Centro de Derechos Humanos, denunció que los detenidos se encuentran en un "limbo" sin cargos formales ni peticiones fiscales en su contra. Afirmó que el régimen actúa de esta manera debido a la falta de supervisión externa sobre sus instituciones judiciales y penitenciarias.

Roque lamentó que las gestiones de familiares y activistas para lograr la liberación de los manifestantes, como la presentación de recursos de habeas corpus, no han dado resultados positivos hasta ahora. Señaló que las autoridades se niegan a proporcionar información sobre el estatus legal de los detenidos a sus allegados.

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