La corporación cubana CIMEX S.A. reconoció que mintió al tachar de noticia falsa la denuncia del periodista uruguayo Fernando Ravsberg sobre la venta de cemento echado a perder en la tienda Boyeros y Camagüey de La Habana.

CIMEX, parte del conglomerado militar GAESA, dijo que venden productos vencidos por la creciente crisis económica en Cuba en una información poco clara en las redes sociales.

“Esclarecemos que como parte del comercio minorista y mayorista existen productos que por diversas causas no logran el 100 por ciento de su comercialización antes de la fecha de vencimiento, lo cual no quiere decir que pierdan su utilidad, aunque sí disminuyen su valor de venta para determinadas unidades. Tampoco significa que sean destruidos, la realidad de nuestra nación no nos permitiría algo así, por tal motivo al verificarse que el producto mantiene sus condiciones se dirige a otros destinos para su comercialización”, dijo en Facebook.

CIMEX hizo la aclaración por “una publicación desmintiendo una noticia falsa sobre el mal estado del cemento en el Centro Comercial Boyeros y Camagüey y su destino final”, aunque no dijeron directamente que mintieron al tachar de fake news (noticia falsa) la denuncia hecha por Ravsberg.

El periodista uruguayo que vive en Cuba dijo en Facebook: “Bueno, Cimex reconoce que ‘la noticia falsa que publicó Ravsberg’ no era tan falsa. En vez de hacer revisión sistemática de las redes sociales deberían hacer revisión sistemática de sus almacenes para que no se den cuenta de que se les vencieron los productos un año después”.

Ravsberg agregó “esto es una joya, los productos se les ponen viejos ‘por diversas causas’, entre las cuales seguramente no está su incapacidad comercial (…) Si quieren profundizar y aclararnos por qué no nos explican por qué se les ponen viejas los productos y por qué se percatan casi un año después de la fecha de vencimiento”.

“Algunos dirigentes empresariales de Cuba se creen dioses, el problema es que cada día somos más los ateos”, señaló.

El periodista denunció este miércoles que en la tienda Panamericana de Boyeros y Camagüey “todo este material de construcción se echó a perder en los almacenes de Cuba, según me cuentan los trabajadores de ese lugar. En Europa cada saco cuesta unos 30 euros. Así que ahora a botarlo, total en temas de construcción andamos sobrados”.

CIMEX respondió ese mismo día a la noticia de Ravsberg que tachó como fake news. “Está circulando en las redes sociales una noticia sobre el mal estado del cemento en la ferretería Boyeros y Camagüey, CIMEX comunica que esta noticia es falsa. El producto se encuentra en proceso de nivelación hacia otras unidades comerciales”.

“Dice Cimex que la noticia de los sacos de mortero es falsa, que están en buen estado y se están llevando a otras tiendas. Vencieron en julio de 2021 y sí, están en muy buen estado como se ve en la fotografía”, señaló Ravsberg en tono sarcástico con una imagen donde se ve la fecha de vencimiento.

Varios cubanos aprovecharon la aclaración de CIMEX para criticar a la empresa.

“Es una falta de respeto esto. Da vergüenza que sean tan irresponsables que den como fake new un hecho que después, además de ser rigurosamente cierto, terminan justificando y ablandando como que no es tan grave. Están perdidos los dirigentes de CIMEX. Cero cultura del detalle. Cero comprobación. Un papelazo es lo que han hecho y el pueblo necesitando y sufriendo gracias a la ineficiencia y la indolencia de ustedes. Ojalá muchos periodistas cubanos fueran como Fernando Ravsberg”, dijo Marisela Rodríguez.

Elizabeth Blazquez dijo que no compra cemento porque es pobre. “Me compraron un paquete de pechugas de pollo en MLC que costó 55 dólares y estaban echadas a perder, logré rescatar menos de la mitad del paquete. Verdes como los campos de Cuba las pechugas, en la tienda Roseland de Neptuno, no reclamé porque como bien ustedes dicen al comprador no lo respetan. Pero sí que venden productos en mal estado y vencidos dejen la labia”.

“Como la merluza comprada en Zona+ de Sancti Spíritus en febrero con fecha de vencimiento en octubre de 2021. Me di cuenta al llegar a casa. Irrespeto total al cliente”, dijo Raúl Comas.

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