En la Mesa Redonda del 28 de diciembre de 2020 Marino Murillo Jorge, jefe de la Comisión de Implementación y Desarrollo de los Lineamientos en la explicación de las nuevas tarifas eléctricas reconoció que el 22,5% de los cubanos viven en condición de miseria. 

Ante la presión popular ejercida en redes sociales en contra del tarifazo el gobierno cubano se vió obligado a postergar el alza de los precios. Murillo intentó explicar tal decisión fundamentando el respeto al criterio del pueblo en medio de un ambiente de malestar e incertidumbre. 

Durante su alocución Marino Murillo se refirió al criterio de uno de los consumidores que planteaba que consumir 100 Kwh/mes era como vivir en la “Edad de las cavernas”. A lo que en un presunto despiste el jefe de la Comisión de Implementación y Desarrollo respondió validando que casi el 25% de los cubanos viven en la miseria, atendiendo al número de equipos eléctricos que tienen en casa.

Marino Murillo explica que para consumir 100 kwh/mes se debe tener en casa un ventilador, una tv y puede que un refrigerador. Solo el uso de esos tres equipos moderadamente daría un consumo tan bajo. 

Al exponer el consumo del sector residencial Murillo mostró la clara división y desigualdad social en la que vive el cubano. La clase media baja, de recursos limitados representa según la explicación de Murillo el 68,7% que sumado a los que “viven en la edad de las cavernas” (22,5%) sería el 91,2% de la población.

La “creciente” clase media de cuentapropistas y beneficiarios de altas remesas apenas llega al 6,63%. Mientras que la clase alta, donde se cuentan empresarios con privilegios ronda el 0,16%. Los magnates, aquellos con un consumo superior a los 5000 Kwh debido al descomunal uso de equipos electrodomésticos y luminarias son solo 125 familias, el 0,013% de la población.

Datos relevantes que muestran la distribución del poder económico y político del país. 

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