La desesperación por la profunda crisis económica en Cuba sigue empujando a cientos de personas a abandonar el país de manera ilegal, sin importar los riesgos o las consecuencias. Este viernes 20 de septiembre, las autoridades de Bahamas devolvieron a 19 migrantes cubanos (16 hombres y tres mujeres), la mayoría procedentes de Villa Clara y Ciego de Ávila, quienes habían intentado huir por vía marítima antes de ser interceptados en alta mar.

Con este nuevo retorno, ya son 70 las operaciones de deportación desde países de la región en lo que va de 2024, lo que eleva el número total de migrantes cubanos devueltos a 1,069. A pesar de las advertencias constantes de las autoridades sobre los peligros de las salidas ilegales, miles de cubanos siguen buscando cualquier oportunidad para escapar del colapso económico que enfrenta la isla.

La aguda escasez de alimentos, la inflación descontrolada y el deterioro general de la calidad de vida en Cuba están impulsando un éxodo que no parece detenerse. Mientras la economía sigue desplomándose, los cubanos se ven atrapados en un ciclo de pobreza del cual no logran escapar, y los intentos de emigrar se vuelven cada vez más desesperados. Ante este escenario de incertidumbre, los cubanos optan por arriesgar sus vidas en el mar o emigrar a cualquier país, esperando encontrar una vida mejor.

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