Dos jóvenes policías de Hialeah, en el condado de Miami-Dade, fueron arrestados este jueves tras acusaciones de esposar y golpear a un hombre sin hogar hasta dejarlo inconsciente.

Rafael Otano, de 27 años, y Lorenzo Orfila, de 22, se entregaron personalmente a las autoridades y fueron fichados en la cárcel de Miami-Dade alrededor de las 9:30 am, de acuerdo con los registros policiales.

Ambos son acusados de secuestrar una persona sin hogar, llevarla a un lugar aislado y golpearla mientras estaba esposado. En consecuencia, ahora los jóvenes den responder por los presuntos delitos ​​de secuestro a mano armada y agresión.

Orfila también está acusado de mala conducta oficial, según muestran los registros. La fiscal estatal de Miami-Dade, Katherine Fernandez Rundle, dijo que un civil, Ali Amin Saleh, de 45 años, también fue arrestado en relación con el caso por presunta manipulación de la víctima.

Fernandez Rundle anunció los cargos durante una conferencia de prensa el jueves por la tarde, donde estuvo acompañada por el jefe de policía de Hialeah, George Fuente, reportan medios locales.

“Ninguno de los que estamos aquí hoy aceptará jamás las acciones que hemos esbozado hoy. No permitiremos que policías deshonestos abusen de sus poderes y traicionen al pueblo al que sirven”, dijo Fernández Rundle.

El incidente habría ocurrido el 17 de diciembre, cuando los oficiales respondieron a una llamada de disturbios en un centro comercial en W. 60th Street. Allí se encontraron con la víctima, José Ortega Gutiérrez, de 50 años, quien no tiene hogar, es conocido por deambular por la zona.

Ortega fue esposado y colocado en la parte trasera de un automóvil de la policía de Hialeah, a pesar de que las imágenes de vigilancia de la escena no muestran una razón para detenerlo, indicaron las autoridades. Luego, en lugar de ser trasladado a la cárcel, como corresponde en casos similares, los oficiales lo llevaron a un lugar aislado donde lo golpearon y lo arrojaron al suelo mientras aún estaba esposado.

La víctima perdió el conocimiento y se despertó sin esposas, solo y sangrando por la cabeza. Caminando se encontró con un oficial de policía de Hialeah fuera de servicio que estaba paseando a su perro y llamó al 911 por él. Contó lo sucedido y lo llevaron a un hospital para recibir tratamiento.

Los investigadores descubrieron que el GPS de sus vehículos policiales mostraba que Otano y Orfila estaban fuera de su sector asignado ese día. Tampoco encendieron su cámara corporal durante el encuentro, agregó Fernandez Rundle. Orfila era un veterano de 3 años en el departamento y Otano ha estado allí durante seis años.

Ambos oficiales habían sido despedidos por el alcalde el jueves por la mañana, según el jefe de policía de Hialeah.

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