Un abogado cubano expresó su frustración y disgusto ante la insuficiencia de su salario, haciendo un recuento de cómo había invertido casi todo su salario mensual en apenas un día para pagar solo alimentos y servicios básicos.

Su publicación en redes sociales el jueves ha generado cientos de comentarios y más de 1000 reacciones. En ella, el profesional comienza explicando que gana un sueldo de 5500 pesos, que puede ser más o menos, por encima de la media salarial.

“Hoy salgo a las 5 del trabajo y paso por el mercado, compro 10 libras de arroz $500, 10 libras de frijoles $1400, 5 libras de pepino porque del tomate ni hablar $100, dos potes de ají cachucha $80, un mazo de cebollas $200, dos mazos de cilantro $40, sigo mi camino y paso por casa de la mensajera $900 los mandados de la bodega con su servicio incluido porque no tengo el tiempo para ir a buscarlos, no por cómodo, sino por falta de tiempo”, detalló.

A esto suma el pago de la electricidad y el agua por $480 y $50, respectivamente, además de dos paquetes de galletas que adquiere para sus hijos por $200. Luego, en la casa, su esposa le recuerda que no ha comprado aceite, el cual consigue en casa de una vecina por $700.

“Se acabó el romanticismo. Una flor cuesta $100. Compro una jabita de pan a $170. Quiero guardar algo para comprar los zapatos del niño que ya no dan más para ir a la escuela, pero me quedan $680 y faltan 29 días para volver a cobrar”, lamentó.

“Hasta cuándo vamos a vivir así, el salario de un mes y lo gasto en una tarde y no cubre ni la mitad de las necesidades básicas, porque no hable ni del plato fuerte, ni del aseo, ni las meriendas de la escuela, ni transporte, ni muchas otras cosas más”, señala.

Según describió, al llegar a casa su esposa le dice no hay corriente desde las tres de la tarde y debe restablecerse a las 9:00pm. “Qué triste realidad de los cubanos (…), dónde está ese paraíso que es el comunismo.

“No me digas que soy continuidad porque no quiero, quiero un país donde yo trabaje y me alcance para vivir, no para rabiar. Mis hijos sufren, mis padres sufren, yo sufro, mis clientes sufren, Cuba sufre mientras tú sigues en tu burbuja de mentiras y falsedades. No más mentiras. Queremos Vivir”, dijo aparentemente dirigiéndose a quienes ostentan el poder en la isla.

En 2021, el gobierno cubano fijó el salario mínimo en 2100 pesos al implementar la medida conocida como Tarea Ordenamiento, que desató una inflación sin precedentes en el escenario de un rotundo desabastecimiento de alimentos y artículos de primera necesidad.

En agosto, el ministro de Economía de Cuba, Alejandro Gil Fernández, reconocía que el salario no alcanzaba para vivir. Semanas después, Marta Elena Feitó Cabrera, ministra de Trabajo y Seguridad Social, comentaba que una nueva subida salarial en Cuba no iba a durar "posiblemente" ni un mes porque los precios subirían rápidamente.

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