El expresidente Donald Trump ha vuelto a nombrar a Tom Homan, exdirector de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), como su "zar de la frontera" en un esfuerzo por intensificar la política de inmigración en su nuevo mandato presidencial. Homan, quien supervisó las políticas migratorias de línea dura durante el primer mandato de Trump, ahora liderará lo que se anticipa como una de las mayores operaciones de deportación en la historia de Estados Unidos.
Con décadas de experiencia en inmigración, Homan ha sido un firme defensor de las políticas restrictivas que implementó bajo la administración de Trump, destacando su compromiso con un enfoque más riguroso en el control fronterizo. Su reciente nombramiento refleja la promesa de Trump de reanudar detenciones masivas, una estrategia que incluye retomar los arrestos en los lugares de trabajo y priorizar la deportación de inmigrantes indocumentados considerados "amenazas a la seguridad nacional".
Un enfoque de “tolerancia cero”
Durante su tiempo como director de ICE, Homan fue pieza clave en la implementación de la política de "tolerancia cero", una medida que procesaba penalmente a quienes cruzaran ilegalmente la frontera y resultó en la polémica separación de miles de familias migrantes. Aunque Trump eventualmente firmó una orden ejecutiva que puso fin a estas separaciones, Homan ha defendido repetidamente esta práctica, argumentando que era parte de hacer cumplir la ley de manera justa. En una entrevista, incluso señaló que la separación familiar “no es diferente a cuando un ciudadano estadounidense es separado de su familia al cometer un delito dentro del país.”
A lo largo de los años, Homan ha respondido con firmeza a las críticas sobre esta política. Durante una reciente conferencia conservadora, expresó su molestia por las constantes demandas legales a raíz de estas separaciones: "Hicimos cumplir la ley," afirmó, justificando las acciones bajo su mandato.
Plan de deportación masiva
Homan ha dado indicios de que, si Trump gana un segundo mandato, la operación de deportación será masiva, dirigida a inmigrantes sin documentos con antecedentes criminales en primer lugar. Esta estrategia de "lo peor primero" priorizaría la expulsión de aquellos considerados un riesgo para la seguridad nacional antes de concentrarse en otros grupos.
En su rol, Homan no requerirá confirmación del Senado, por lo que tendrá la libertad de actuar directamente bajo las instrucciones del expresidente. Trump, desde su red social Truth Social, ha descrito a Homan como un “incondicional en control fronterizo” y ha expresado su confianza en que nadie está mejor capacitado para liderar este esfuerzo.
Posición contraria a las ciudades santuario
Homan es también un firme opositor de las ciudades santuario, jurisdicciones donde las autoridades locales limitan su cooperación con las agencias federales de inmigración. Durante su mandato en 2018, llegó a afirmar que los líderes de estas ciudades deberían rendir cuentas personalmente por los crímenes cometidos por inmigrantes indocumentados en sus territorios. Recientemente, Homan mencionó que, bajo la próxima administración, se buscaría revocar la financiación federal para estas ciudades y demandarlas.
Experiencia y perspectiva
Homan, además de su historial en la Patrulla Fronteriza y ICE, ha colaborado como comentarista de Fox News, donde ha defendido con frecuencia las políticas migratorias restrictivas, argumentando que un control fronterizo estricto es fundamental para la seguridad y el bienestar del país. Desde su perspectiva, las políticas de inmigración restrictivas no solo protegen a Estados Unidos, sino que también ayudan a disuadir la migración ilegal y a evitar situaciones peligrosas para los migrantes.
Un futuro bajo la sombra del control fronterizo
Trump ha enfatizado que bajo la supervisión de Homan, el enfoque hacia la frontera será más agresivo que nunca. Al respecto, Homan afirmó que el plan propuesto reduciría los altos costos de mantener y cuidar a millones de personas en situación migratoria irregular, gastos que, según él, se han disparado en la administración actual.
Homan cree firmemente en las políticas de control migratorio no solo como una cuestión de ley, sino también como una medida preventiva para salvar vidas, citando experiencias personales en las que presenció cómo el cruce fronterizo podía llevar a situaciones trágicas para quienes buscan ingresar a Estados Unidos de manera irregular.
Con la designación de Homan, Trump refuerza su compromiso con una política de control migratorio de alto impacto, perfilando un futuro donde la política fronteriza estadounidense podría retornar a una postura de cero tolerancia y deportación masiva.
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