La guerra en Oriente Medio ha entrado en una fase crítica. Este lunes 23 de junio de 2025, Irán lanzó seis misiles contra bases militares estadounidenses en Doha (Qatar) y otro más contra una posición estadounidense en Irak, en respuesta directa a los recientes bombardeos ordenados por Donald Trump contra tres instalaciones nucleares en territorio iraní.
Testigos en la capital qatarí aseguran que se escucharon múltiples explosiones, mientras que las autoridades locales desplegaron equipos de emergencia en torno a la base de Al Udeid, principal enclave militar de EE.UU. en la región.
"Nunca habíamos sentido explosiones de esta magnitud en Doha. La ciudad está en alerta máxima", relató un ciudadano desde las inmediaciones de la base.
En paralelo, Israel ha intensificado su ofensiva contra Irán, bombardeando seis aeropuertos y varias infraestructuras militares, incluyendo depósitos de misiles y lanzaderas. Este ataque es parte de la operación iniciada el pasado 13 de junio, y ocurre en un contexto de escalada que ha generado preocupación mundial.
A última hora del día, dos nuevos misiles lanzados desde Irán impactaron en territorio israelí, activando las alarmas antiaéreas en Tel Aviv y Jerusalén. Las autoridades israelíes han confirmado daños materiales pero no víctimas.
"La situación es crítica. Cada ataque recibe una represalia inmediata. Estamos al borde de una guerra regional abierta", advirtió un alto funcionario europeo.
Mientras tanto, en la sede de la ONU, el embajador iraní afirmó que su país responderá “en el momento, la naturaleza y la escala” que considere adecuados, reforzando la idea de que lo peor podría estar por venir.
Irán también amanazó con cerrar el estratégico Estrecho de Ormuz, por donde transita gran parte del petróleo mundial. Esta advertencia, respaldada por el Parlamento iraní, ha sido calificada de "extremadamente peligrosa" por Kaja Kallas, alta representante de la Unión Europea para Política Exterior.
"Cerrar Ormuz sería un punto de no retorno para la seguridad energética global", declaró Kallas desde Bruselas, apelando a la diplomacia como única vía de salida."
Mientras tanto, el presidente ruso Vladimir Putin lanzó una inquietante advertencia: una Tercera Guerra Mundial está más cerca que nunca, y ha vuelto a reclamar "toda Ucrania" como parte del conflicto geopolítico en expansión. El mundo entero observa con creciente inquietud el avance de esta guerra que ya ha desplazado a miles de personas y amenaza con desestabilizar el equilibrio global.