Un cubano de Miami fue identificado entre las víctimas de la lancha hundida en Bahía Honda, en la provincia de Artemisa, cuando una embarcación de tropas guardafronteras intentaba presuntamente evitar una salida ilegal del país de un grupo de migrantes.

Familiares y amigos lo identificaron como Omar Reyes Valdés, también conocido como el Chino, cuyo perfil en redes sociales indica que es oriundo de la provincia de Pinar del Río y actualmente reside en la ciudad de Miami.

También lo señalaron como el posible capitán de la lancha que entró en Cuba a recoger al grupo de migrantes, un hecho que causó la muerte de cinco personas a borde de dicha embarcación, incluyendo una niña pequeña.

Se nos ha ido de la familia un gran hombre (EL CHINO) Omar Reyes Valdés. Primo, te recordaremos siempre en nuestros corazones. Supe de tu partida después de que una lancha GUARDAFRONTERAS impactara la que tú venías manejando, primo, que en paz descanses ellos tendrán que pagar por eso. Viniste a cuba y mira, acabaron con tu vida y la de los demás hasta una niñita de 2 añitos, es algo que jamás se nos va a olvidar”, escribió un usuario, de acuerdo con América Tevé.

Aunque las autoridades cubanas refirieron que las muertes se produjeron a causa de un choque entre las embarcaciones, después de que una lancha rápida violara el mar territorial de Cuba en una operación de tráfico de personas, muchos aseguran que se trató de un hecho intencional.

La madre de la niña fallecida, ofreció su testimonio a Martí Noticias. “Mi hermano estaba ahí; mi cuñada, que está embarazada, igual. Todo el mundo recibió golpes”, dijo. “Nos montamos en la lancha y, cuando salimos, él (chofer) disminuyó la velocidad porque se vio cerrado por todos lados, porque venía otra lancha. Cuando les pasamos por al lado, él (oficial de guardafronteras) dijo: 'Ahora los voy a partir al medio', y después nos embistió”, relató.

“La partió, sí, yo vi los pedazos de lancha, y yo perdí el conocimiento del golpe que me dio en la cabeza, y ahí fue cuando perdí a mi niña en los brazos, y la ola me tiraba para encima de un pedazo de la lancha. Y ahí fue cuando reaccioné y empecé a gritarle a mi hermano, que mi niña dónde estaba”, dijo.

“Tiraron los salvavidas porque se los pedimos. Y porque la gente, agarrada a los trozos de lancha, se estaban hundiendo. Prácticamente, no nos ayudaron en nada. Hubo que pedirles a gritos que nos ayudaran. Había una mujer embarazada, estaba mi niña, y había más gente golpeada, y la gente se estaba ahogando, y todo se estaba hundiendo. Ya no había dónde agarrarse”, expuso la madre, una de las sobrevivientes del incidente. 

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