La Administración de Seguridad del Transporte (TSA) ha implementado nuevas pautas en los aeropuertos de los EE.UU destinadas a reducir el contacto físico entre los agentes y los pasajeros a medida que se acerca la temporada de verano. Las nuevas reglas siguen los informes de que 590 miembros del personal de la TSA ya han dado positivo por COVID-19, según CNBC.

"En interés de los trabajadores de primera línea de TSA y la salud de los viajeros, TSA se compromete a realizar cambios prudentes en nuestros procesos de detección para limitar el contacto físico y aumentar la distancia física tanto como sea posible", dijo la TSA en un comunicado.

Los pasajeros ahora tendrán que escanear su propia tarjeta de embarque y eliminar cualquier artículo prohibido, o artículos que activen sensores de alarma, de su equipaje en los puntos de control de seguridad. También deben colocar artículos más pequeños como teléfonos, llaves y billeteras directamente en bolsas de mano para "reducir los puntos de contacto durante el proceso de revisión" y separar sus alimentos de mano en bolsas de plástico transparente.

"Los alimentos a menudo activan una alarma durante el proceso de selección", indicó el comunicado de la TSA. "Separar la comida de la bolsa de mano disminuye la probabilidad de que un oficial de la TSA necesite abrir la bolsa de mano y retirar los alimentos para una inspección más cercana".

Los agentes de la TSA ahora deben usar máscaras faciales y se recomienda a los pasajeros del aeropuerto que hagan lo mismo.

Mientras tanto, el gobierno de los Estados Unidos está considerando introducir medidas adicionales de salud y seguridad en los aeropuertos, como controles de temperatura y pruebas térmicas para detectar el virus en los pasajeros antes de abordar. El secretario interino de Seguridad Nacional, Chad Wolf, dijo al Dallas Morning News que el departamento está explorando nuevas tecnologías "para ver qué podemos hacer para proporcionar algún nivel de seguridad".

Recomendado para ti