Recientemente, un ciudadano guatemalteco presentó un recurso de amparo ante la Corte Constitucional de ese país con el fin de impedir que el multimillonario convenio médico con Cuba sea renovado a finales de año.

De igual modo, esta persona solicitó que se le ofrezca a los doctores asilo para que puedan quedarse trabajando en Guatemala.

El letrado José Raúl Robles representó al guatemalteco César Fernando Molina Palma, quien interpuso el recurso, explica una nota de El Nuevo Herald.

Robles manifestó que su cliente se encuentra preocupado por la posibilidad “cierta, inminente y determinada” de que el gobierno de Alejandro Giammattei pueda renovar el convenio con Cuba, que le cuesta al Estado guatemalteco al menos $4.6 millones al año.

“Los costos reales del convenio no han podido ser dilucidados por la negativa del gobierno guatemalteco —a petición de Cuba— de hacer público el acuerdo de financiación de la estadía de los médicos”, dijeron fuentes del Congreso al portal.

Asimismo, este sitio refiere que “el documento presentado ante la Corte de Constitucionalidad asegura que en caso de renovarse el contrato, se estaría produciendo un “grave daño” a la economía de Guatemala porque los médicos cubanos reciben un salario superior —y exento de impuestos— al de sus homólogos guatemaltecos”.

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