Una doctora cubana desde el exilio, se atrevió a ofrecerse de voluntaria para trabajar en Matanzas en medio de las críticas circunstancias de la epidemia de coronavirus en ese territorio.

La cubana, que no revela su identidad escribió directamente al perfil oficial del Gobierno provincial en Matanzas: “Por favor, yo solo quiero ayudar, me ofrezco como voluntaria, lo que sea, quiero ayudar a las personas soy doctora, Matanzas me necesita Cuba me necesita. No dan abasto”, dejó escrito.

Esta fue la respuesta del Gobierno: “Buenas tardes, se le agradece infinitamente su disposición, ya están Ilegando los refuerzos, recibimos esta tarde el primer grupo de Médicos y Enfermeras de la Brigada Médicos Henry Reeve, que nos acompañará, a revertir esta situación. Los matanceros no estamos solos”.

Los refuerzos a los que se refiere son 100 médicos e igual número de enfermeras de la Brigada Henry Reeve, procedentes de varias partes del país, así como 36 profesionales de los servicios médicos de las FAR; además de 370 recién graduados de la Universidad de Ciencias Médicas de Matanzas, a los que le adelantaron la graduación para que trabajen.

Sin embargo, las propias autoridades que rechazan a esta doctora con experiencia en misiones médicas, reconocieron que no es suficiente esta movilización pues confirmaron que verificarán “la situación de los médicos y personal de la salud que no están trabajando, con el propósito de garantizar que se incorporen la mayor cantidad posible ante la actual contingencia sanitaria”.

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