Una familia entera fue asesinada en su hogar del municipio San Luis, en Santiago de Cuba y su vivienda presuntamente incendiada para simular que habían sido víctimas de un incendio. El hecho se reportó este viernes y al menos hay tres víctimas mortales, un joven y sus dos padres, informó el periodista independiente Yosmany Mayeta en su canal de Facebook.

Las autoridades aún no han confirmado las causas exactas del crimen, pero diversas versiones apuntan a que el ataque podría estar relacionado con un robo, especialmente la desaparición de algunos bueyes y otros animales de la familia de campesinos. El joven, que perdió la vida junto a sus padres en este brutal ataque, fue identificado como Felipe Peña Santos, de 30 años.

La familia residía en la localidad de Chamarreta, una pequeña comunidad rural del municipio.

Algunos residentes denunciaron que allí los ataques son frecuentes. "En ese lugar están acabando y a nadie le importa nada de lo que les pase a los que quedan allá", narra la hija de un habitante de allí que ha sido víctima de robo varias veces y afortunadamente nunca ha estado en la casa.

Un allegado a la familia agregó que "antes de matarlos le llevaron todo lo que tenían, incluyendo los animales, ya que era una familia que tenía dinero, pero tristemente vivían en el medio de un campo. El poblado se llama Chamarreta y ellos vivían alejados de lo que es la población como tal, que no llegan a 100 habitantes siquiera".

"Eran muy amigos míos, los mataron y quemaron adentro de la casa, al matrimonio y al hijo. Felipe Peñas Sablón, alías Felipón, Gisela Santos, esposa, y Felipe Peñas Santos, Felipito. En la casa no quedó nada... hasta los animales cogieron candela.

Pido justicia para esa familia y que el peso de la ley caiga sobre los asesinos", dijo otro internauta allegado a las víctimas.

No sé en qué están pensando las autoridades policiales cuando afirman que la violencia ha decrecido en el país, cuando todos los días surgen nuevos ejemplos del aumento del índice de criminalidad en toda la nación. Arrebatos, asaltos, violaciones, robos con violencia y...¡asesinatos! se han multiplicado y la policía ausente al parte.

Solo aparecen y por manadas, cuando un grupo de personas protesta por defender la poca dignidad que todavía queda; ahí si está presente la flamante policía nacional revolucionaria. Un Patria y Vida y todos a una dicen PRESENTE, para encarcelar la verdad y la razón. Para perseguir el verdadero crimen no; para eso no están, y cuando llegan ya no hay solución. 

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