Los problemas en Cuba se siguen acumulando y el déficit de cilindros de gas licuado, popularmente conocidas como "balitas de gas", parece que no tiene fecha exacta para acabar. La madre Amelia Calzadilla se había quejado de esa situación y desde entonces los medios oficialistas reportan la escasez de cilindros.
"No tenemos los suficientes cilindros para desde las plantas, los almacenes, salir con los carros llenos para los puntos y retornar con el vacío, como no tenemos cilindros en los puntos de venta; la alternativa es ir buscar el vacío, llenarlo y retornarlo para que se pueda vender", dijo Lidia Rodríguez Suárez, directora comercial de la Empresa Comercializadora de Combustibles, de la Unión Cuba Petróleo (CUPET).
La única fábrica de cilindros que existe en el país tiene un incumplimiento en su plan de entrega, tanto de nuevos como de reparados, lo que dificulta el ciclo del aprovisionamiento. Tratamos de hacer importaciones directas y no fue posible, el tema del financiamiento es complicado, la única opción es la fábrica, que los hace nuevos o los repara, pero es insuficiente, contó Rodríguez a la estatal Agencia Cubana de Noticias (ACN).
"Se necesitan hoy más de 100 mil cilindros para mantener una logística de llenado que llegue al punto de venta, se recoge el vacío y según el promedio de venta se logre mantener la estabilidad; la mayoría de las veces se recoge el de ayer, se lleva a llenar y retorna, se hace hasta en horarios extendidos, está sucediendo en todo el país", detalló.
Según la directiva, el plan de ventas de gas licuado del petróleo (GLP) en Cuba creció en un 29 por ciento (%) con respecto al año anterior, incremento del consumo asociado a la situación energética que vive el país por el déficit de generación, y por las propias afectaciones eléctricas que impactan en la población.
"Ese déficit que tenemos hoy la fábrica no es capaz de cubrirlo a corto plazo. Existe más de un millón de clientes de GLP de población en el país, sin contar a la capital, y que en la actualidad no tienen una mayor satisfacción del cliente en cuanto a la distribución del gas por causa de los cilindros", apuntó.
Pedro Llerena Rivero, director general de la Empresa de Conformación Matanzas (Conformat), única de su tipo en Cuba en la confección y reparación de cilindros, dijo que es insuficiente la producción de cilindros para que disponga CUPET de los envases requeridos en la distribución del gas licuado a la población.
Hasta junio último el plan era de 45 000 nuevos cilindros de 10 kilogramos y se logró un real de 35 370, en el caso de los reparados sí se sobrecumplió lo previsto en más de nueve mil unidades, puntualizó.
Llerena utilizó la habitual excusa del régimen de La Habana para justificar los problemas en Cuba: el embargo de Estados Unidos. "Las razones fundamentales del incumplimiento en la generación de nuevos cilindros se encuentran en la insuficiente disponibilidad financiera para la compra de la materia prima en el exterior, y el impacto del bloqueo económico, comercial y financiero de los Estados Unidos al país", dijo.
El directivo dijo que el 96,7 % de la materia prima que se utiliza para la fabricación del cilindro es importado, y aunque la fábrica tenga buena disponibilidad financiera, no recauda dinero en divisas para adquirirla porque sus producciones las comercializa en moneda nacional.
"Por las limitaciones que impone el bloqueo tenemos que comprar la materia prima en países distantes, a altos precios, depender de navieras encarecidas, y además impactan en las dinámicas fabriles las limitaciones con el combustible y el déficit de generación de energía que afronta el país, lo que se relaciona igualmente con la hostil política norteamericana respecto a la isla", agregó.
La fábrica actualmente cuenta con materia prima para tres meses de trabajo, lo que les permitirá fabricar unos 35 000 cilindros nuevos, y reparar unos 16 000 más, y cuentan ya con financiamiento para comprar materia prima para reparar unos 40 000 en el cuarto trimestre del año, reseñó la ACN.