Los residentes del edificio No 1, en la circunvalación noroeste de la ciudad de Guantánamo, quedaron sorprendidos por los altos precios que les exigían —más de 23 000 pesos por apartamento— para pintar las paredes exteriores de sus viviendas.
La suma representa más del doble de lo que les costó su apartamento a los vecinos del inmueble en esa urbe del oriente cubano. “Nos aclararon que las cosas no serían igual, los precios habían aumentado y había que pagarlo todo. Lo que no imaginamos fue que el todo ese sería tanto”, dice Yanierky Laffita, titular de un apartamento en el segundo piso.
El exorbitante aumento de precio es resultado de la medida gubernamental de 2021 conocida como Tarea Ordenamiento, con el propósito de eliminar la dualidad monetaria. El salario mínimo del país aumentó a 2100 pesos mensuales, pero la escasez generalizada, entre otros factores, provocó una inflación sin precedentes en la isla.
“Imagínese que al dueño de cada vivienda le toca pagar más de 23 mil pesos, solo por los exteriores y el paso de escalera. Con eso no puede una familia normal que trabaja, mucho menos yo, que estudio Medicina y vivo solo”, dijo José Humberto Contantén, del cuarto piso, al periódico oficialista Venceremos, de Guantánamo.
Además del excesivo costo, las labores ni siquiera contemplan otras reparaciones que se hacen necesarias, según los residentes. “El problema es que quieren pintar sin arreglar, por ejemplo, la instalación hidrosanitaria exterior rota desde hace más de dos años, y sin colocar los aleros que evitarían que el agua de lluvia chorree por las paredes recién pintadas”, explica Yordanis Muñoz, del tercer piso.
Según refirió, en una ocasión anterior los trabajadores empezaron a pintar, pero cayó un aguacero y no hicieron nada al respecto, ya que sin los aleros el azul de la pared se fue abajo, “y así mismo lo dejaron”. “Claro, entonces el costo no lo asumíamos nosotros”, declaró.
“Si fuera de otra manera, tal vez lo valoráramos un poco más. Pero tan caro, y sin garantías de que la pintura sea de calidad, o esté bien aplicada y aguante toda el agua que le pueda caer, al menos, por un tiempo; ni pensarlo”, sostuvo.
Todos esos argumentos se los trasmitieron a los técnicos e inversionistas de la Dirección municipal de Vivienda en la reunión con la junta de vecinos. En el intercambio, debe aprobarse cualquier intervención en los edificios multifamiliares. Sin embargo, la respuesta fue negativa, relata el citado medio.
“La gente simplemente se niega a pagar, primero, por los altos costos, y segundo, porque exigen otras acciones de conservación que no podemos acometer por falta de recursos, como cambio de marquetería e instalaciones hidrosanitarias”, reconoció Wendy Duff Iznaga, jefa de Administración de la Dirección municipal de Vivienda.
“El problema es que las materias primas subieron en todas partes y el costo de la mano de obra no depende de nosotros: se calcula por un sistema informático”, dijo Mercedes Frómeta Fabré, subdirectora de Inversiones de la Dirección municipal de Vivienda en Guantánamo. “El litro de pintura de vinil está a 126 pesos, y el de aceite para la marquetería sale a 500 pesos. El resultado es que pintar un paso de escalera de un gran panel de tres niveles cuesta 152 mil 686 pesos, contra los 10 mil pesos que anteriormente se pagaba por un edificio entero”, detalló.
“Es un sistema en el que está todo. Desde cuánto cuesta el metro cuadrado de pintura, hasta el monte y desmonte de los andamios..., ingresas lo que vas a ejecutar y lo calculas”, expuso la directora técnica productiva de la Empresa Provincial de la Construcción (Epcons), Julia Esther Pérez Barthelemy.