Lo confirma la prensa oficialista cubana así que no, no es invento. O sí, lo es, pero autorizado por el gobierno ante la crítica situación que enfrenta el país en todos los sentidos, pero, en este caso, para cumplir con la distribución de pan normado.

Según la Agencia Cubana de Noticias, la Empresa del Pan comercializará en los próximos meses el producto con una formulación que incluye un 20 por ciento de harina de maíz para garantizar los niveles de producción del alimento ante el déficit de insumos, pero ese será para sectores priorizados como el turismo.

El director de la entidad estatal, Daniel Cobas Cheda, explicó que la demanda del producto ha crecido, el 2020 resultó incluso el año de mayor producción, y en el 2021 el plan se basa en el real del pasado periodo.

“Para el primer cuatrimestre del año se planificaron 17 mil 977 toneladas y se han obtenido más de 23 mil, lo que demuestra un crecimiento, aunque aún no se satisface la demanda”, añadió.

Para poder garantizar a la población el plan previsto por la empresa se decidió extender la comercialización de producciones con un 20 por ciento de harina de maíz, algo que ya se había hecho a pequeña escala.

En mayo, a raíz de las afectaciones con la importación del trigo y el reajuste que se realizó para garantizar la disponibilidad hacia destinos priorizados, se decidió la distribución más ampliada del pan con harina de maíz.

A eso se suma el uso de extensores como la calabaza y la yuca, afirmó, en tanto dejó claro que será para el consumo poblacional.

En tanto María de los Ángeles del Rey Batista, directora de inspección de la Oficina Nacional de Inspección Estatal, reconoció que “no es el mismo sabor, pues tiene ligeras variaciones, aparecidas sobre todo por la granulación de la harina de maíz que provoca cambios en la corteza”.

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